Las saponinas son compuestos tensoactivos cuyas soluciones acuosas pueden formar espuma estable, poseen capacidad emulsionante y forman soluciones micelares con un comportamiento similar al de los detergentes. La mayoría son producidas por plantas [1] y en menor grado por invertebrados marinos [2]. Numerosos reportes han demostrado que éste grupo de compuestos presenta diversas actividades biológicas, entre ellas, actividad antimicrobiana, citotóxica, insecticida, molusquicida y alelopática, si bien sus mecanismos de acción aún son desconocidos en la mayoría de los casos. La principal fuente tradicional de saponinas de uso industrial y biotecnológico ha sido y es la especie arbórea chilena Quillaja saponaria. La sobreexplotación de sus bosques nativos, junto a prácticas no sustentables de producción llevó a la escasez de este recurso natural. La posibiidad del desarrollo de nuevos biomateriales de elevado valor agregado surge del hecho que las hojas de la especie forestal arbórea nativa de Uruguay y Brasil, Quillaja brasiliensis, son también una fuente renovable de saponinas con comprobada efectividad como adyuvantes de vacunación [3]. A los efectos de aumentar el rendimiento de extracción y buscar nuevas fuentes de saponinas con potencial efecto inmunoadyuvante, se evaluó la concentración de saponinas en distintos órganos de la especie Q. brasiliensis, incluyendo un individuo adulto e individuos juveniles (1-2 años). Los materiales vegetales del individuo adulto (Qb147) se colectaron en Valle Edén (Tacuarembó) y se analizaron corteza, ramas y hojas en distintas estaciones. Los individuos juveniles consistieron en plántulas de 1 a 2 años de edad, obtenidas por germinación de semillas colectadas del mismo individuo adulto (Qb147) de las cuales se analizaron hojas, tallos y raíces en 4 muestreos estacionales. Existen varias técnicas para la cuantificación de saponinas, entre los cuales se incluyen los métodos afrosimétrico, hemolítico, volumétrico, espectrofotométrico y cromatográfico. De estos métodos se eligió el de la medición de la espuma (afrosimétrico) por su facilidad de manejo y buena correlación [5] con el contenido de saponinas. La concentración de saponinas totales en los extractos acuosos de hojas fueron aproximadamente 5 veces mayor en las individuos juveniles respecto al árbol adulto; los tallos y las raíces de estas plántulas también presentaron una concentración elevada de saponinas.
